El partido de ayer contra el Español se planteaba como una final en la que sólo valía ganar, más aún después de que nuestros vecinos no nos hicieran el favor de ganar a los chés y de que hubieran puntuado y adelantado el Deportivo y el Villarreal. Dependíamos de nosotros mismo, con ganar los 4 partidos restantes cuartos seguro, pero... hablamos del Atleti.
Gran ambiente en el Calderón a pesar de lo tardío del encuentro (ya está bien de tanto partido por el plus), y para no variar los primeros sustos los da el equipo visitante, los locales gozan de alguna ocasión pero no llegan a tirar a portería, se ve un cierto dominio rojiblanco de todas maneras y hay esperanzas en llevarse el partido, hasta que aparece Perea y se lleva por delante la ceja de Chica al más puro estilo de football americano (tó palante), el árbitro no ve nada y ordena seguir el juego hasta que advierte que hay sangre, para el partido y roja a Perea, amarilla a Raúl García y balón a tierra, ¿y la falta?, no ha habido falta o no la pita a pesar de expulsar al agresor, que me lo expliquen... Bronca y cabreo generalizado en el Calderón.
Inmediatamente Abel mete en el campo a Pablo sin calentar en lugar de un sorprendido Maxi, más bronca desde la grada. En esas estamos cuando Mariano Pernía idea el cometer un penalty que pone el 0-1 en el marcador, más bronca, cae alguna botella desde la grada (mejor dicho desde el anfiteatro lateral donde me encuentro), algunos localizan al lanzador y se masca el linchamiento, finalmente queda en bronca y por ahí no aparece nadie de seguridad (después subirían a retirar una pancarta, para eso sí, 3 tíos nada menos).
No nos hemos repuesto del cabreo cuando se lanza una falta lejana que peina Pablo (sin calentar y sin suerte) y Jarque se la encuentra en carrera para poner el 0-2, se intuye la tragedia, adiós a la Champions y hasta a la UEFA.
Llega el descanso y la hora del bocata, la hora de lamentarse, Manolo dice que ha decidido convencer a su hijo para que se haga del Madrid, no quiere un futuro para él como nuestro presente...
Empieza la segunda parte con ciertas ganas atléticas pero en la grada no hay mucha fe, nos acordamos más del Osasuna o Rácing que del Villarreal o Barcelona, y de repente llega un balón a Forlán que no se lo piensa y le da un zapatazo, ¡GOL!, me dice Jose cuando aún no ha llegado el balón a la portería, y efectivamente, golazo de Forlán, de escándalo Forlán que dice Tomi, 1-2 y hay esperanzas, más de media hora por delante para empatar (o remontar que pensamos los optimistas).
Pero es que 8 minutos después Pernía (Mariano) pega otro zapatazo hacia portería que el Kun se encarga de atajar para marcar el empate, delirio en la grada, se canta de todo, se grita desafiante hacia el anfiteatro norte. Lo más difícil está hecho, se ha empatado con diez y la grada se vuelca con el equipo que achucha con más casta y ganas que con técnica y razón. El partido se vuelve loco por momentos pero el Español sigue dando sustos y Pernía alguno más, Heitinga sube a todas, Ufjalusi abandona el puesto de central y se le ve de medio punta, entra Banega y el Atleti sigue subiendo balones pero el gol no llega.
Algunos empezamos a dar por bueno el punto conseguido y pensamos que ganando por 2 goles al Valencia seguimos dependiendo de nosotros mismos con un posible cuádruple empate la semana próxima entre Valencia, Atlético, Villarreal y Deportivo, pero quizás es mucho pedir...
El tiempo se agota y el Español pierde tiempo en cada caída de un jugador, el empate no es malo para ellos pues le coloca a 5 puntos del descenso, el cuarto árbitro saca el luminoso que indica 5 minutos y el Atleti está volcado en cada córner y en cada balón que sube. Todos los balones terminan en Forlán que está muerto pero que no es sustituido, me desespero y reclamo balones para otros jugadores más oxigenados, y entonces Simao se inventa un pase entre la zaga españolista y el balón llega manso a Forlán que en un segundo o dos (para mi fueron más) envía el esférico al fondo de las mallas... el Calderón no se cae de puro milagro pues cuarenta y pico mil personas botaron al unísono, a Forlán aún le quedan fuerzas para correr hasta el banderín del córner a celebrarlo, allí se juntan todos, INCREÍBLE !!!
Aún quedó tiempo para algún susto españolista con un balón que obliga al conservador Leo Franco a salir del área jugándose la expulsión pero el árbitro no quiere más polémica y pita el final del partido.
¿Por qué somos del Atleti?... una posible respuesta: por si hoy vamos al fútbol y nos encontramos con que el Atleti gana y de esta manera, existen otras formas de ganar pero no tan emocionantes
Gran ambiente en el Calderón a pesar de lo tardío del encuentro (ya está bien de tanto partido por el plus), y para no variar los primeros sustos los da el equipo visitante, los locales gozan de alguna ocasión pero no llegan a tirar a portería, se ve un cierto dominio rojiblanco de todas maneras y hay esperanzas en llevarse el partido, hasta que aparece Perea y se lleva por delante la ceja de Chica al más puro estilo de football americano (tó palante), el árbitro no ve nada y ordena seguir el juego hasta que advierte que hay sangre, para el partido y roja a Perea, amarilla a Raúl García y balón a tierra, ¿y la falta?, no ha habido falta o no la pita a pesar de expulsar al agresor, que me lo expliquen... Bronca y cabreo generalizado en el Calderón.
Inmediatamente Abel mete en el campo a Pablo sin calentar en lugar de un sorprendido Maxi, más bronca desde la grada. En esas estamos cuando Mariano Pernía idea el cometer un penalty que pone el 0-1 en el marcador, más bronca, cae alguna botella desde la grada (mejor dicho desde el anfiteatro lateral donde me encuentro), algunos localizan al lanzador y se masca el linchamiento, finalmente queda en bronca y por ahí no aparece nadie de seguridad (después subirían a retirar una pancarta, para eso sí, 3 tíos nada menos).
No nos hemos repuesto del cabreo cuando se lanza una falta lejana que peina Pablo (sin calentar y sin suerte) y Jarque se la encuentra en carrera para poner el 0-2, se intuye la tragedia, adiós a la Champions y hasta a la UEFA.
Llega el descanso y la hora del bocata, la hora de lamentarse, Manolo dice que ha decidido convencer a su hijo para que se haga del Madrid, no quiere un futuro para él como nuestro presente...
Empieza la segunda parte con ciertas ganas atléticas pero en la grada no hay mucha fe, nos acordamos más del Osasuna o Rácing que del Villarreal o Barcelona, y de repente llega un balón a Forlán que no se lo piensa y le da un zapatazo, ¡GOL!, me dice Jose cuando aún no ha llegado el balón a la portería, y efectivamente, golazo de Forlán, de escándalo Forlán que dice Tomi, 1-2 y hay esperanzas, más de media hora por delante para empatar (o remontar que pensamos los optimistas).
Pero es que 8 minutos después Pernía (Mariano) pega otro zapatazo hacia portería que el Kun se encarga de atajar para marcar el empate, delirio en la grada, se canta de todo, se grita desafiante hacia el anfiteatro norte. Lo más difícil está hecho, se ha empatado con diez y la grada se vuelca con el equipo que achucha con más casta y ganas que con técnica y razón. El partido se vuelve loco por momentos pero el Español sigue dando sustos y Pernía alguno más, Heitinga sube a todas, Ufjalusi abandona el puesto de central y se le ve de medio punta, entra Banega y el Atleti sigue subiendo balones pero el gol no llega.
Algunos empezamos a dar por bueno el punto conseguido y pensamos que ganando por 2 goles al Valencia seguimos dependiendo de nosotros mismos con un posible cuádruple empate la semana próxima entre Valencia, Atlético, Villarreal y Deportivo, pero quizás es mucho pedir...
El tiempo se agota y el Español pierde tiempo en cada caída de un jugador, el empate no es malo para ellos pues le coloca a 5 puntos del descenso, el cuarto árbitro saca el luminoso que indica 5 minutos y el Atleti está volcado en cada córner y en cada balón que sube. Todos los balones terminan en Forlán que está muerto pero que no es sustituido, me desespero y reclamo balones para otros jugadores más oxigenados, y entonces Simao se inventa un pase entre la zaga españolista y el balón llega manso a Forlán que en un segundo o dos (para mi fueron más) envía el esférico al fondo de las mallas... el Calderón no se cae de puro milagro pues cuarenta y pico mil personas botaron al unísono, a Forlán aún le quedan fuerzas para correr hasta el banderín del córner a celebrarlo, allí se juntan todos, INCREÍBLE !!!
Aún quedó tiempo para algún susto españolista con un balón que obliga al conservador Leo Franco a salir del área jugándose la expulsión pero el árbitro no quiere más polémica y pita el final del partido.
¿Por qué somos del Atleti?... una posible respuesta: por si hoy vamos al fútbol y nos encontramos con que el Atleti gana y de esta manera, existen otras formas de ganar pero no tan emocionantes
5 comentarios:
Adal,
Ayer vi el partido en un pub "escocés". La mitad de la gente se fue al descanso. Grité cada gol como si estuviera en el estadio. La mayoría eran del atleti light que estaban más preocupados de atarcarle a la hamburguesa de lo que pasaba en el campo. también había algún merengón listillo que se "indignaba" con los fuera de juego que le pitaban al Espanyol (ya sabemos que el mandril también quiere la exclusiva de las remontadas). Total, al final, cuando sacaron el cartel de 5 minutos les metía a todos en el partido. Estaba seguro de que marcabamos. Este es nuestro Atleti y no la falsificación que nos quieren colar. un abrazo. miguel
Pues sí, amigo. Este es el Atlético. Nos gustará más o menos, pero así somos y así seremos.
De nuevo un final con delirio en las gradas para celebrar una victoria imposible. Pero, la fe de Forlán nos hizo creer a todos. ¿Nos quedan más emociones?
Honor y gloria para Forlán.
Ya tocaba, ya tocaba, vivir una noche mágica. Sé que es poco, pero menos es nada. Deberíamos jugarse así siempre, aunque luego se pierda o se gane. Forlán es el amo. Un abrazo.
¿Pacha Adal?
Pues yo también fui uno de esos fríos y calculadores seguidores que, visto como estaba el percal, no daba por malo el punto conseguido, pero mira, la fe mueve montañas, la esperanza es lo último que se pierde, el Atleti es así ... Lo que pollas quieras decir: el caso es que, sientan o no sientan estos colores, al menos, el otro día, fueron profesionales. Y eso, en buena parte, se debe al toque de atención que les dimos el día del Sporting. Y al que no le guste la afición del Atleti ... Que se muera.
A ver ahora el partido del domingo, porque estoy acojonado. Se nos da fatal el puto Valencia.
Un abrazo.
Hola, me quedo con la segunda parte del título 9+ Forlán, ¡vaya golazos!
Vota por los premios Futbol Chicks si eres tan amable para elegir al mejor jugador de la tamporada, tu opinión me importa.
Saludos
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